Las ventas ANTAD reportaron un crecimiento de 1.7% nominal anual en tiendas iguales durante octubre, una cifra inferior a la tasa de inflación que se ubica en 4.76%.
Las ventas en tiendas totales crecieron 4.3% nominal anual, cifra también levemente por debajo de la inflación.
La desaceleración en las ventas es una señal de alerta para el consumo privado, que en nuestro país representa 71.6% del PIB.
Vale la pena señalar que las ventas ANTAD son una muestra del comercio minorista, que no incorporan a grandes detallistas como Oxxo y Walmex, ni tampoco el comercio de servicios y el comercio electrónico a través de Amazon y Mercado Libre.
Aun así, el último dato de cuentas nacionales del consumo presenta un crecimiento menor al 2% anual.
Las cifras no cuadran con la confianza del consumidor, que alcanzó un máximo histórico en octubre.
Posiblemente el aguinaldo depositados a los jubilados, las transferencias sociales y la política de salarios mínimos provoquen una percepción positiva en la sociedad, aunque en cuentas nacionales no se termina de reflejar una robustez del consumo.
Algo similar sucede en EEUU, aunque de forma inversa, en donde la confianza del consumidor según la universidad de Michigan se encuentra muy baja y el consumo avanza firme al 3% anual.
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