De acuerdo al ENOE, el total de ocupados en la economía a diciembre del 2021 fue de 56.94 millones de personas. Esto representa 1.18 millones de personas adicionales respecto al registrado antes de la pandemia.
El número de trabajadores identificado como asalariados y subordinados alcanza un nuevo máximo en diciembre pasado, superando en 185 mil puestos el máximo previo de marzo 2020.
No obstante, el empleo formal se encuentra solo 68 mil puestos por encima de sus máximos previos pre-covid, es decir después de 21 meses, mientras que el resto de la recuperación obedece al sector informal.
El desempleo aumenta 0.1 punto en diciembre para cerrar el año en 4%, que se compara con un 3.3% en marzo 2020.
El aumento de la población en edad de trabajar sin empleo se disimula en la estadística de desempleo por una caída de la tasa de participación laboral (personas que trabajan o buscan empleo como porcentaje de población de 15 a 64 años).
La participación laboral cae al 59.6%, desde 60.5% registrada en febrero del 2020.
Las personas que no buscan empleo no forman parte de la estadística del desempleo.
El subempleo baja durante el 2021, al pasar de 7.76 millones a principios del año pasado a 5.69 millones al cierre. Sin embargo, aún existen alrededor de 1.7 millones más de subocupados respecto al 2019.
Todavía falta avanzar en el saneamiento del mercado laboral, principalmente en la dinámica y composición del empleo formal, que está afectada por la pandemia y los cambios en la normatividad del outsourcing.
En este contexto, la falta de inversión en un ambiente poco amigable para los negocios cobra su cuota en la cantidad y calidad del empleo.