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¿Puede México replicar el Milagro Asiático?

Noviembre 27, 2019

Las posibilidades de que un país pobre o de clase media alance el nivel de desarrollo de los "Milagros Asiáticos" dentro de una, dos o tres generaciones son pocas. 


Esta es la conclusión de Reda Cherif y Fuad Hasanov,  economistas del FMI.


Según su investigación All the Way to the Top: Industrial Policy, Innovation, and Sustained Growth entre 1960 y el 2014, solamente 16 países alcanzaron ese desarrollo y algunos de ellos lo lograron porque tuvieron la suerte de descubrir petróleo o unirse a la Unión Europea. 


Los "milagros", como Hong Kong, Corea y Singapur, así como Japón, Alemania y los Estados Unidos antes que ellos, se desviaron de las recetas de crecimiento estándar, apuntaron alto y se esforzaron por desarrollar industrias sofisticadas que estaban mucho más allá de sus habilidades tecnológicas y experiencia previas. Se centraron en la construcción de economías robustas impulsadas por las exportaciones. 


Los grandes éxitos de estas economías fueron el resultado de asociaciones entre empresas y gobierno. 

El estado intervino para eliminar obstáculos de mercado. Las empresas, a su vez, innovaron, inventaron y prometieron rendir cuentas por el apoyo que recibieron. El proceso fue una política industrial "verdadera", o más específicamente una Política de Tecnología e Innovación.

Algo bastante diferente del enfoque seguido por México, en el que la política industrial ha sido la ausencia de política, bajo el argumento de que los subsidios causan ineficiencia en la economía.


Un claro ejemplo de la asociación Gobierno-Empresa es Corea del Sur, que le permitió pasar de ser una economía pobre en la década de los 50's, destrozada por la guerra, a ser un país de ingreso alto con un PIB por habitante de 27000 dólares contra 10300 de México. 


El papel de las empresas domésticas fue clave en el despegue espectacular de los tigres asiáticos.


El estado apoyó el desarrollo de las empresas domésticas en industrias clave que requerían innovación y tecnología, en vez de depender de la inversión extranjera para el desarrollo.


El "Milagro Asiático" dependió críticamente de un salto tecnológico hacia industrias sofisticadas.


Las estrategias actuales de China (2025) y Alemania (Industria 4.0) están claramente en esa dirección.


Las condiciones de la economía global no son las mismas que las de hace cincuenta o sesenta años. 


Pero si México quiere acercarse a las posibilidades de un crecimiento más acelerado que permita sacar realmente de la pobreza a la mitad de la población, necesita reposicionar a la empresa doméstica en el centro de la estrategia de crecimiento.


Un primer paso es reducir el costo de la formalidad.

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