El índice del dólar ha frenado la caída en los últimos días y ya se ubica en niveles de finales de noviembre. Hay que recordar que el dólar llevaba una tendencia de baja desde mediados de marzo.
El movimiento de recuperación del dólar también afecta al peso mexicano, que se deprecia 4.1% respecto al mínimo de 19.59 registrado el mes previo.
Las tasas de largo plazo en dólares se mantienen en una tendencia alcista, pasando de 0.5% en agosto del 2020 a 1.14%, niveles bajo aún pero superiores a los rendimientos de bonos alemanes, suizos o japoneses que pagan tasas mínimas o negativas.
El alza de tasas en dólares responde a un elevado déficit fiscal en EU que exige mayores rendimientos para los inversionistas, al aumento de cotizaciones de commodities, y también a la expectativa de una mayor recuperación económica.
Esto abre interrogantes para los mercados financieros, en especial para las divisas de economías emergentes.
Banxico tiene su junta de política monetaria el próximo jueves.
El consenso espera un recorte de 25 puntos base para la tasa de interés.
¿Habrá espacio para ajustar la tasa local ante un dólar y tasas de bonos del tesoro de EU subiendo?
El webinar que ofrece EconoFinanzas el 11 de febrero analizará la perspectiva del peso en este contexto.