De acuerdo con estadística del INEGI, la actividad económica creció 0.5% mensual durante junio, para lograr un avance de 4% en los últimos doce meses.
Respecto a enero de 2020, el incremento es de 3.4%, una cifra modesta respecto a lo alcanzado por Brasil (4.8%), Chile (5.1%) y Colombia (8.3%).
Aun así, sobresale el crecimiento de 6% en ese mismo periodo para las actividades agropecuarias y de 14.1% en la construcción, que con la nueva revisión de las cuentas nacionales a una base 2018, alcanza un máximo histórico. El repunte reciente de la construcción está asociado a la ola nearshoring y a obra pública.
El comercio es otro sector que se recupera de manera firme. El comercio mayorista opera 6% por encima de principios de 2020 y el minorista un 11.1%, que también se encuentra en máximos históricos.
Los servicios profesionales se mantienen 18.6% por encima de enero 2020, con un crecimiento sólido en los últimos meses.
Los sectores más débiles son los servicios de apoyo a negocios, impactado por la reforma outsourcing, que caen 71.2% en este periodo.
La generación de electricidad y suministro de agua opera 19% por debajo en el mismo periodo, una restricción relevante para las nuevas inversiones.
Los restaurantes y hoteles aún presentan un rezago de 6.9%, y se mantienen estancados desde el verano del año pasado.